No había margen de error y el Real Madrid se equivocó, Manchester City merecido ganador

El Manchester City se metió en los cuartos de final de la Champions, tras vencer por 2-1 al Real Madrid en la vuelta de octavos de final, que tuvo una noche para el olvido, principalmente para su zaguero central, Raphael Varane, quien en dos errores le dio la victoria al conjunto local.

El equipo inglés se adelantó rápido en el marcador, con un tanto de Raheem Sterling (9), luego de que Varane, equivocará un pase al interior del área dejando solo al inglés, quien definió con arco vacío. Sin embargo, los merengues lograron reaccionar e igualaron las acciones, por medio de  Karim Benzema, quien a los  28' de  cabeza  puso el 1-1, pero Gabriel Jesús, a los 68' adelanto a los Citizens, aprovechando un nuevo error de Varane y definiendo a un costado de Curtois.

Con esta victoria por 2-1, al igual que en la ida en Madrid, durante el mes de marzo pasado, el conjunto ingles encajo un global de 4-2, cerrando a su favor esta eliminatoria de octavos de final, clasificándose a la siguiente fase en la cual enfrentará al Lyon, que elimino a la Juventus.

Cabe recordar, que el City se tomó la revancha de las semifinales de 2016, cuando el Real Madrid lo apeó en la que luego sería la primera Champions de las tres consecutivas logradas por Zinedine Zidane al frente del Real Madrid.

Desconcierto merengue

Se trata de la primera eliminatoria de Champions que pierde el técnico galo, tras ganar las doce anteriores que había jugado al frente del equipo blanco.

El encuentro lo empezó sufriendo ante la presión del equipo inglés que se adelantó pronto tras un error de Raphael Varane, que también volvería a ser el protagonista negativo en el segundo tanto del City.

Gabriel Jesús robó el balón en área al francés para pasar al centro donde Sterling sólo tuvo que empujar el balón a la red madridista (9).

El gol acentuó el desconcierto de los blancos atrás, donde notaron la falta de su capitán Sergio Ramos, ausente por sanción.

Ambos tantos, sin duda fueron duros golpes, de los cuales no se pudieron levantar, y marcaron su adiós del torneo más importante del mundo a nivel clubes.

Sterling y Foden fueron un auténtico dolor de cabeza para los blancos, que poco a poco fueron recuperando el control del balón, tras unos veinte primeros minutos complicados.

Sin embargo, lograron reponerse, tras una internada de Rodrygo por la derecha, acabó con un centro al área donde apareció el francés para picar el balón de cabeza y hacer el 1-1 (21). El gol tranquilizó los ánimos del Real Madrid, al que otro tanto permitía igualar la eliminatoria.

El equipo blanco empezó a jugar con más orden en defensa, mientras al City trataba de volver a presionar alto en busca de un error que le permitiera arrancar cerca del área de Courtois.

Olfato de goleadores

Una vez iniciada la segunda mitad, el Real Madrid mostró otra cara tras la pausa, poniendo más intensidad en su juego y tratando de hacerse amo del centro del campo, donde apareció más Toni Kroos.

El equipo blanco llegaba con peligro y Benzema volvía a poner en jaque a Ederson con un disparo dentro del área (64).

Pero cuando mejor estaba el equipo blanco apareció Gabriel Jesús para levantar al equipo inglés, interceptando una mala cesión de Varane para marcar el segundo de disparo cruzado ante la salida de Courtois (68).

El gol cayó como un jarro de agua fría en las filas madridistas, que con el tiempo en contra trató de irse adelante en busca de un tanto que volviera a meterle en el partido.

Movió el banquillo Zinedine Zidane intentando meter hombres de refresco buscando intensidad para llegar, mientras el City buscó el control del juego hasta llevar el partido al final y lograr su billete para Lisboa.

Cabe mencionar, que no fue el mejor encuentro para los dirigidos por Pep Guardiola, tampoco el peor, ya que no sufrieron en ningún pasaje del partido, manteniendo a raya sus líneas y aprovechando al 100% los errores de rival.

Tanto Sterling, como Gabriel Jesús, fueron muy inteligentes en su tantos convertidos, debido a que leyeron bien los tiempos del partido, posicionándose en el lugar correcto e intuyendo los errores de Varane, quien prácticamente entrego el encuentro en bandeja de plata a los locales.