El trabajador del volante, que lleva a sus hijos con él porque la mamá los abandonó, recibió ayuda de la población con leche, pañales, ropa, juguetes y más.
26/12/2024 10:34
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Don Félix, el taxista que trabaja acompañado de su hijo de 4 años y su bebé de cinco meses, recibió la solidaridad de la población, que le está ayudando con ropa, pañales, leche de fórmula, dinero y más.
La mañana de este jueves, el padre de familia visitó El Mañanero, en medio de su jornada de trabajo, mostrando cómo realiza las carreras con la pequeña Mariana en el asiento delantero y su hijo Félix en el maletero.
Contó que los lleva con él debido a la necesidad de trabajar y que la bebé necesita leche. "Mi voluntad, la fuerza que me mantiene son mis hijos, las únicas personas que están a mi lado", contó.
Don Félix vive en la zona del Plan 3.000 y sale a trabajar en las tardes y durante la noche hasta las 2 de la mañana. Sin embargo, en ocasiones llega a casa a las 5 de la mañana si hay demanda. Duerme apenas dos horas y vuelve a empezar su jornada.
Los pequeños están con él todo el tiempo. Ya tiene biberones listos para darle a su bebé, que nació prematura a los seis meses con 1.200 kg de paso. Estuvo dos meses y una semana en la incubadora. Si necesita algo más, detiene el taxi y la atiende. Su leche es especial para cuidar su estómago. Un tarro de leche le dura menos de tres días. "Los pasajeros me felicitan. A veces incluso me dicen que no les de el cambio y me voy contento", dijo.
Sin madre y con el recuerdo de una hija fallecida
"No sé dónde está (su mamá). No me dijo. Nos abandonó. Cuando le llamo y contesta, no dice dónde está", comentó. El taxi que maneja no es suyo, paga una renta de 110 bolivianos. Afortunadamente, tiene casa propia.
"No hallo pesado ser padre solo. Yo tuve una hijita que perdí cuando ella tenía 14 años, ya era jovencita. Ahora mis hijos son el amor más grande, son las únicas personas que te van a querer siempre, sin ningún tipo de condición. Eso me da fuerza, no me da flojera, no me incomoda. Cuando la llevo al hospital, aunque me mire la gente, estoy tranquilo, no siento ni vergüenza. Ellos me motivan, me dan esperanza. Ahora están chiquitos, quiero verlos hasta jóvenes. Me da pena dejarlos a otra persona, prefiero manejarlos", afirmó.
La navidad la pasó tranquilo porque estaba junto a sus hijos, aunque trabajando, pero también preocupado por lo que les depara el futuro. Su objetivo es reunir lo necesario para mantenerlos. "Nos fue bien", agregó.
No se imaginó que el video que le hizo un pasajero se iba a volver viral y resultaría en ayuda de toda la población.
"Los hijos son lo máximo. He visto que las mamás andan con sus hijos, pero los papás, a veces, los dejan. No entiendo porqué hacen eso. Yo no los dejaría, prefiero no comer yo para darle de comer a mis hijos porque hay días que solo como una vez y después le meto coca, para que no me dé hambre. Me voy tranquilo y me tomo harta agua para no estar mal, consumo harta agua", detalló.
"Vi que es la manera más cómoda trabajar en taxi, me ofrecieron otros trabajos, pero no se puede con bebés, porque hay que cumplir un horario", destacó.
En El Mañanero, la familia recibió pañales, un canastón y juguetes para el pequeño Félix. Las personas que quieran colaborar se pueden comunicar al número 716-84476.
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