Ascensión de Guarayos se declara en desastre: Incendios y sequía dejan al municipio bajo una densa humareda

La situación en Ascensión de Guarayos es crítica. El municipio promulgó una ley municipal declarando el estado de desastre debido a los devastadores incendios forestales y la sequía que azota la región. Este martes 3 de septiembre, la localidad amaneció bajo una intensa humareda que cubre todo el entorno, consecuencia de los múltiples focos de calor que se han intensificado en los últimos días.

El alcalde municipal, Pablo Eddie Guaristi Peredo, informó que en una reunión del Comité de Operaciones de Emergencia Municipal (COEM), con la participación de diversas instituciones, se tomó la determinación de promulgar esta ley de emergencia.

“Se ha determinado a través de una sesión extraordinaria que ha tenido el Concejo Municipal en la cual ha elaborado una ley autonómica municipal declarando desastre por sequía y los incendios forestales”, manifestó el Guaristi.

Mustafá resaltó la gravedad de la situación. “Tenemos alrededor de 400.000 focos de calor activos, lo que ha llevado a la suspensión de actividades escolares tanto en la zona urbana como rural. Pedimos a la población y a las autoridades que nos apoyen, especialmente a nuestros bomberos, quienes están agotados y necesitan equipamiento y recursos para continuar combatiendo el fuego”.

Un bombero de la localidad, visiblemente exhausto, manifestó la urgente necesidad de mochilas forestales, barbijos, botines, gafas, agua y alimentos para seguir en la lucha. “Estamos cansados y no podemos seguir sin más apoyo. Necesitamos la ayuda de todos”, declaró.

El fuego continúa avanzando sin control, arrasando con los bosques y poniendo en riesgo la vida y la salud de los habitantes de Ascensión de Guarayos. Las escenas que se viven en el municipio son desgarradoras: familias enteras sufren los efectos de la densa humareda, con irritación en los ojos, dolor de garganta y una angustia que parece no tener fin. Las autoridades reiteran su llamado a la solidaridad y al apoyo urgente para enfrentar esta emergencia que amenaza con destruir la riqueza natural de la región y poner en peligro a los más vulnerables: nuestros niños y las personas de la tercera edad.