“Dávila podría ser sentenciado a 20 años, y no a cadena perpetua”, según un exmilitar

El reciente anunció de extradición del exjefe antidrogas boliviano Maximiliano Dávila hacia Estados Unidos marca un hito en los esfuerzos internacionales contra el narcotráfico. Para el analista, abogado y militar en servicio pasivo Jorge Santistevan, esta acción envía un mensaje claro: Estados Unidos no solo busca justicia en este caso, sino que podría ampliar el alcance a otros implicados en el futuro.

Santistevan subrayó que aún queda pendiente el traslado final de Dávila a territorio estadounidense, pero anticipó una condena significativa. “Estos delitos suelen ser sancionados con penas de 15 a 20 años, o cadena perpetua si hay muertes de ciudadanos norteamericanos, lo cual no aplica en este caso. Sin embargo, Dávila enfrentaría mínimamente entre 15 y 20 años de prisión”, explicó.

El analista también destacó que el exjefe antidrogas podría colaborar con las autoridades estadounidenses para obtener una reducción de pena.

“A cambio, Dávila estaría obligado a proporcionar información respaldada por pruebas documentales, testificales y materiales”, comentó, sugiriendo que dicha cooperación podría abrir nuevas líneas de investigación.

Santistevan advirtió sobre las implicaciones futuras de esta extradición.

“Así como se extraditó al expresidente de Honduras bajo este mismo procedimiento, no sería extraño que otros expresidentes bolivianos vinculados al narcotráfico puedan ser llevados a rendir cuentas en Estados Unidos”.