Yacedrah Williams que reside en Redford, Michigan (Estados Unidos), confundió un bote de pegamento para reparar uñas rotas con gotas para los ojos.
23/04/2021 16:50
Escuchar esta nota
Era aproximadamente la una de la mañana cuando Williams se despertó y vio que se había quedado dormida con las lentillas puestas. Por ello, procedió a sacar el frasco de su bolso que está fabricado para entrar en contacto con sus globos oculares. Al parecer, el formato de este producto es bastante similar a uno que también lleva siempre consigo en el bolso. Sin embargo, este segundo bote está pensado para pegar uñas rotas.
Un tanto aturdida por el sueño, la mujer cogió de forma accidental ese último producto en lugar del que está indicado para los ojos. Como haría habitualmente, echó la cabeza hacia atrás y, antes de que la primera gota penetrara en su ojo ocular, Williams descubrió que el envase no era del color que ella creía. Demasiado tarde.
Sin pestañas de forma permanente
“Traté de limpiarlo, pero me selló el ojo”, dijo Williams, que empezó a hablar a gritos a su esposo, Derrick, para que avisase a urgencias: "Empecé a tirar agua fría y estaba tratando de abrir los ojos, pero no pude. Solo gitabaa mi marido que llamara al 911". Una vez en el hospital, los médicos tuvieron que arrancarle las pestañas para poder sacarle las lentillas, que estaban perfectamente fijadas. Lo que sí puede celebrar es que gracias a que estaban pegadas no ha perdido la visión.
Los médicos tuvieron que arrancarle las pestañas para poder sacarle las lentillas
De ahora en adelante, Yacedrah Williams mirará antes de usar. Aunque haya perdido en este episodio unas pestañas que no va a volver a recuperar, lo más seguro es que se cerciore en el futuro de qué productos se está echando realmente en zonas tan delicadas como los globos oculares.
Mira la programación en Red Uno Play
17:10
18:00
18:55
20:45
22:05
00:00
17:10
18:00
18:55
20:45
22:05
00:00