El beso de los cazadores frente al león muerto causa indignación

"Trabajo duro bajo el cálido sol de Kalahari... bien hecho. Un león monstruoso". El pie de foto ha sido el remate para la indignación. La imagen la ha compartido Legela Safaris, una empresa sudafricana de caza y fotografía de animales salvajes. En primer plano, un león tendido en el suelo, aparentemente dormido. Detrás, una pareja se besa.

El león lo acababan de cazar Darren y Carolyn Carter, un matrimonio de Alberta, en Canadá, que regenta un negocio de taxidermia, y su gesta ha levantado una gran polvareda en las redes sociales. Tanto, que la empresa ha desaparecido de Facebook.

Junto a la presuntamente romántica estampa, varias fotografías más muestran que los Carter no sólo cazaron al "león monstruoso", sino también a una leona. "No hay nada como cazar al rey de la jungla en las arenas del Kalahari", rezaba el pie de foto, junto a una felicitación de la agencia turística: "Felicidades a la feliz cazadora y al equipo".

Se trata de un polémico y floreciente negocio en el que a los clientes se les ofrece, por una determinada tarifa, disparar a animales salvajes indefensos, incluyendo especies en peligro de extinción, que son criados en cautiverio para tal propósito.

La imagen en cuestión fue originalmente publicada por la compañía Legelela Safaris, que, según el medio británico, organiza tours de cacería cobrando unos 3.000 dólares por matar a una jirafa, 2.500 dólares por una cebra y otras sumas "a petición" por leopardos, rinocerontes y elefantes.