70 años después: La maternidad Percy Boland de Santa Cruz 'clama' por una renovación

En el corazón de Santa Cruz, la Maternidad Percy Boland, construida el 31 de octubre de 1954, se enfrenta a una emergencia que ha llevado a sus instalaciones al borde del colapso. La falta de espacio, ítems e infraestructura ha convertido la atención a los pacientes en un desafío diario, con consecuencias preocupantes para la salud de neonatos y embarazadas.

Atendiendo 12 mil nacimientos al año, la maternidad ha visto un aumento constante en la demanda de sus servicios. De estos, 6400 son por consulta externa, 356 requieren cuidados intensivos, 452 son partos normales y 1929 son cesáreas. Un equipo de 600 trabajadores, entre médicos, administrativos, personal de limpieza y enfermeras, se esfuerzan por atender a la población incluso proveniente de otras regiones.

Andrés Panozo, encargado de control social, expresó su preocupación: "Aquí nos llegan pacientes de todos los departamentos, de provincia hasta del exterior. ¿Cómo se puede explicar que Santa Cruz no haya crecido en su infraestructura y equipamiento para atender semejante cantidad de pacientes? Es lógico que se van a hacinarse los servicios, la gente en Santa Cruz se nos está muriendo".

Han pasado 70 años desde su construcción, y la Maternidad Percy Boland sigue en condiciones críticas. Rita Mendieta, licenciada, destacó: "Estructuralmente nos falta espacio físico, trabajamos con lo que tenemos que es un equipamiento de hace años". La falta de condiciones en áreas como la lavandería, donde solo una de las cuatro máquinas funciona adecuadamente, obliga al personal a realizar tareas básicas, como lavar a mano.

En la sala de historias clínicas, la falta de espacio es evidente, y las condiciones precarias se extienden por todo el hospital. La infraestructura, obsoleta y desgastada, ya no es suficiente para la demanda actual.

Es imperativo que se tome acción urgente. La Maternidad Percy Boland necesita ser reconstruida y equipada con tecnología actualizada. La salud y la vida de quienes acuden a este centro de atención no deben seguir en riesgo ante la falta de mejoras en las instalaciones médicas.