El esteticista habría administrado tres inyecciones a cada paciente, a un bajo precio económico.
08/07/2025 12:59
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Un terrible hecho se descubrió y denunció en Reino Unido, donde una mujer estuvo a punto de perder la vida tras aplicarse tres inyecciones de botox por un esteticista que hizo un cobro ‘económico’ por el tratamiento.
La mujer sufrió un paro cardiaco y otras de las pacientes terminaron gravemente enfermas según indican medios locales.
Kaylie Bailey, una madre de tres hijos, es la paciente que estuvo a punto de perder la vida por el tratamiento al que se sometió, y contó que ella pagó cerca de 100 dólares, un precio que era bastante bueno y económico, sin imaginarse las consecuencias que tendría.
Días después de aplicarse las inyecciones, Bailey comenzó a tener problemas de visión. Los médicos del Hospital Royal de Sunderland le diagnosticaron una condición que provoca el descenso del párpado superior, y le recomendaron reposo.
Sin embargo, su estado empeoró y fue diagnosticada con botulismo, una enfermedad potencialmente mortal causada por una bacteria.
Posteriormente sufrió un paro cardiopulmonar y fue reanimada. Pasó tres días en la Unidad de Cuidados Intensivos.
Cuando recibió el alta, contactó a la esteticista, que le dijo que se trataba de un “problema a nivel nacional con el producto”.
Sin embargo, ella era una de las 28 personas a las que se les había diagnosticado intoxicación en el noreste de Inglaterra después de recibir inyecciones antiarrugas.
El Departamento de Salud y Asistencia Social advirtió sobre los riesgos de acudir a “operadores inadecuadamente capacitados en el sector cosmético” que ponen en riesgo la vida de la gente.
“Instamos a cualquiera que considere procedimientos estéticos a que evalúe los posibles impactos en la salud y busque un profesional con buena reputación, asegurado y calificado”, declaró un portavoz.
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