16/01/2020 - 21:31

Sin asistencia: Los verdaderos aventureros del Dakar

Corren sin un presupuesto elevado, en la categoría G2.2 Maratón.

Redacción

Red Uno de Bolivia

Arabia Saudita
Además de participar en el rally más peligroso del planeta, trabajan como militares, mecánicos o dentistas, pero ahí están corriendo el Dakar al lado de los profesionales y despertando así admiración de Fernando Alonso: son los pilotos de moto que afrontan la prueba sin asistencia, haciendo de ellos “los verdaderos aventureros del rally”.

Son incluso una categoría oficial (la 'G2.2 Maratón') de la carrera, que reúne a los motoqueros con poco presupuesto, sin asistencia y con un mínimo equipaje. Solo un baúl metálico de 80 litros de capacidad donde los competidores deben meterlo todo: herramientas, piezas de recambio, mono y botas de recambio. Cada noche en el campamento recuperan su baúl para reparar ellos mismos sus motos para enfrentar la siguiente jornada.

En esta edición, en Arabia Saudita, fueron 41 en la salida de Yedá, el pasado 5 de enero. De 17 nacionalidades y una sola mujer. El jueves, en la previa de la llegada a Qiddiya, solo quedaban 28 en la competencia. El francés Patrice Carillon afirma que en esta categoría lo que hacen es rodar durante la jornada y por la noche deben darse tiempo para ocuparse del tema mecánico de sus motocicletas. Carillon además, con 55 años es de profesión restaurador-hotelero y lleva 12 Dakar a cuestas.

En su baúl, transporta desde Francia bidones de aceite, filtros, piezas de recambio... ¿Y una foto de su familia? "Ehhh, no. Mis hijos han compartido tantas veces conmigo esto, han viajado tanto a través de lo que he hecho, que ya no necesito nada de eso, ya son grandes", explica el francés.

La española Sara García es la única mujer que forma parte de la carrera este año. Esta ingeniera mecánica de 31 años se contagió del virus del Dakar por su padre, que participó como mecánico en los años 1980. "Adoro esta carrera, todos los pilotos sueñan con ella", dice con una gran sonrisa.

Al ser consultada por lo que lleva en el baúl dice: "Toda mi vida" está en el baúl. "Tenemos herramientas, piezas y notas con lo que tenemos que hacer. Porque cuando entramos aquí (en el campamento), estamos cansados y a veces el cerebro no funciona como es habitual".

Este espíritu de la aventura y esta manera de correr la prueba despierta los halagos de los profesionales.

 "Tengo mucha admiración por estos moteros. Son muy valientes y hacen la verdadera aventura", asegura Fernando Alonso.

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