Considerando que los 22 parques nacionales con los que cuenta el país abarcan un total de 18.271.600 hectáreas. Cada guardaparques se encarga de un promedio de 61,938 hectáreas, una cifra muy superior a los estándares internacionales.
28/10/2023 12:26
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En el corazón de la vasta extensión de los Parques Nacionales de Bolivia yace una realidad desgarradora y silenciada: la alarmante escasez de guardaparques. Estos valientes defensores de la naturaleza, encargados de salvaguardar los bosques, se enfrentan a un reto colosal con recursos y apoyo insuficientes.
El informe del Ministerio de Medio Ambiente revela una cifra sorprendente: apenas 295 guardaparques distribuidos entre 22 Parques Nacionales, lo que significa una inadecuada protección para las 18.271.600 hectáreas que abarcan estos territorios.
Un solo guardaparques se ve abrumado por el control de 61.938 hectáreas, una carga descomunal a nivel internacional.
Según las directrices de la Unión Internacional para la Conservación de la Naturaleza, se recomienda un guardaparques por cada 500 hectáreas. Esto evidencia una brecha alarmante: se necesitarían al menos 36.543 guardaparques en todo el país para garantizar una protección eficiente.
La situación se vuelve crítica al observar casos como el del Parque Nacional Amboró, donde, a pesar de sus 637.600 hectáreas, solo 11 guardaparques luchan por su preservación. Estos valientes trabajadores se enfrentan a condiciones desoladoras, careciendo de equipamiento, recursos y un presupuesto adecuado, dejando a los bosques expuestos a quemas, avallamientos y situaciones perjudiciales para el medio ambiente.
En una visita reciente de la Red Uno, se evidenció la desgarradora realidad que enfrentan estos guardianes del medio ambiente. Vehículos esenciales para patrullar y monitorear los vastos territorios presentan graves deficiencias: automóviles sin ventanas varados por llantas pinchadas y motocicletas inoperables, obstaculizando su labor diaria.
Además, se enfrentan a acusaciones. El Viceministro de Régimen Interior y Policía, Jhonny Aguilera, los señaló por supuestamente "permitir" actividades ilegales, esto, tras los recientes descubrimientos de más de 50 hectáreas de plantaciones de coca durante las labores de monitoreo contra incendios forestales que golpeaban la zona y que, afortunadamente ya fueron controlados.
Federico Barrón lamenta la falta de apoyo: "Las autoridades siempre nos dicen que no hay presupuesto. Éramos 30 guardaparques y ahora solo somos 11 para (custodiar) 637.600 hectáreas. Nosotros hacemos lo que podemos, y, a veces, debemos poner de nuestro propio bolsillo".
Distribución de los guardaparques
27 están en Apolobamba, 26 en el Parque Nacional Madidi, 21 en el Parque Nacional Noel Kempff Mercado y en la Reserva Eduardo Avaroa, 19 en Kaa-Iya del Gran Chaco, 18 en Carrasco, 17 en Isiboro Secure, 16 en Tariquia y 15 en Aguaragüe. Además, hay 12 en San Matías y en la Serranía del Iñao, mientras que, 11 están en Amboró, Otuquis y Pilon Lajas, 9 en El Palmar; la Estación Biológica del Beni,Tunari y Cordillera del Sama tienen 8 respectivamente; 7 en Cotapata y el Sajama, Torotoro yManuripi cuentan con 6.
La falta de personal, recursos y apoyo institucional pone en peligro no solo la labor de los guardaparques sino también la integridad de los ecosistemas naturales que resguardan. Urge una acción inmediata y decidida por parte del gobierno y las instituciones pertinentes para dotar a estos valientes trabajadores con los medios y el apoyo necesarios para preservar la riqueza natural del país.
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