La víctima se encontraba recostada en su cama, cuando su pareja la atacó, ella no pudo escapar de su agresor.
25/04/2022 14:18
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El crimen ocurrió el fin de semana en la zona de “Alto Arrumani” cuando Ángel Beltrán Sandoval de 33 años, mató con golpes de un palo de picota a su pareja, que se encontraba recostada en su cama.
El asesino intentó quitarse la vida y luego se entregó a la policía. La pareja tenía tres hijos, quienes quedaron en orfandad, mientras las otras dos menores eran hijas de Ángel y fueron entregadas a su madre (de la primera relación del acusado).
Hasta el momento no aparecieron los familiares de Jhovana Chávez Callejas (33), su cadáver continúa en el Instituto de Identificaciones Forenses (IDIF) de Cochabamba. La única persona que llegó para pedir el cuerpo es la madrina de la víctima.
“Yo la conozco hace 8 años, pedimos justicia. Se fueron a Alto Arrumani porque se compraron un lote en ese lugar, era una mujer trabajadora. La última vez que hablamos fue el pasado jueves”, contó la madrina.
El acusado atacó salvajemente a Jhovana a raíz de unos mensajes, que serían de otro hombre, en un arranque de celos salió al patio tomó un palo de picota, ingresó a su cuarto y golpeó repetidamente la cabeza de la joven madre.
“El sospechoso se constituyó en dependencias policiales donde habría confesado que cometió el delito, por ello se iniciaron las investigaciones correspondientes y se procedió a su aprehensión (…) El Ministerio Público solicitará una sentencia de 30 sin derecho a indulto”, declaró la Fiscal Departamental, Nuria Gonzáles Romero.
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