Macabro hallazgo en Warnes: reportan que una cabra y su cría fueron degolladas

El espanto y la indignación vuelven a sacudir al municipio de Warnes tras el hallazgo de una cabra y su cría brutalmente degolladas.

Este nuevo hecho, reportado este domingo, replica con escalofriante exactitud el patrón de violencia ocurrido el pasado 10 de junio, cuando cinco cabras fueron encontradas sin vida y con signos de abuso en la comunidad de El Coloradillo.

Con este último suceso, ya suman siete los animales muertos en menos de quince días, todos bajo circunstancias violentas que han encendido las alarmas entre los habitantes de la zona. Los vecinos exigen respuestas urgentes a las autoridades ante lo que consideran una ola de crueldad inexplicable que mantiene en vilo a la comunidad.

“No es un ataque de animales salvajes. No hay mordeduras ni señales de pelea. Esto es obra de alguien. Y alguien que sabe lo que está haciendo”, declaró visiblemente afectada doña Marcelina, una de las víctimas del primer ataque.

El primer hecho se registró el martes 10 de junio a la 1:00 de la madrugada, cuando cinco cabras —tres de Marcelina y dos de otra vecina— fueron encontradas muertas en su corral. Los cuerpos presentaban señales de haber sido golpeados y, según denunció la dueña, algunos mostraban indicios de abuso.

Las sospechas se intensificaron cuando cámaras de vigilancia cercanas captaron a un hombre conversando con el cuidador de los animales minutos antes del ataque. Luego se lo observa caminar hacia el corral, en lo que muchos consideran un comportamiento sumamente sospechoso.

Hasta el momento, no se ha emitido ningún comunicado oficial por parte de la Policía ni del municipio, lo que generó mayor frustración y temor entre los pobladores, quienes piden patrullajes, investigación formal y garantías de seguridad.

Algunos vecinos incluso especulan con la posibilidad de rituales, prácticas ocultas o un caso de sadismo reiterado, dada la precisión y brutalidad de los actos.

Mientras tanto, el misterio se agrava y la pregunta sigue sin respuesta: ¿quién está detrás de estos crímenes atroces?