Mató y violó a su enamorada en un rito de iniciación, ahora podría salir en libertad

El feminicidio ocurrió el 13 de marzo de 2016, Omar Alejandro Ordoñez integró “Wander Rap”, una peligrosa pandilla en Cliza, en el Valle Alto. El hombre, junto a su grupo, violó y mató a la colegiala, María del Carmen Carvallo Reyes, que era su enamorada, en un rito de iniciación.

El crimen presenciado por 21 pandilleros de entre 14 y 23 años. Todos fueron aprehendidos y procesados, pero 11 eran menores de edad y cumplieron su sanción en el centro de infractores. Los que participaron del feminicidio eran mayores de edad.

Omar fue sentenciado el 31 de agosto 2017 a 30 años de cárcel por el feminicidio de María del Carmen pero ahora podría salir de “El Abra” con medidas sustitutivas a la detención preventiva que cumple.

Han pasado tres años y ocho meses desde que se leyó la sentencia condenatoria contra los pandilleros, y hasta el momento ese fallo no ha sido ejecutoriado en Sucre. Por ello, Omar Alejandro Ordoñez solicitó la cesación de su detención ante jueces, pero ellos le negaron su salida.

Apeló la decisión y la vocal de la Sala Penal 1, Mirtha Mabel Montaño, decidió otorgarle la posibilidad de salir del penal El Abra en cuanto cumpla con los siguientes requisitos: el pago de una fianza de 100.000 bolivianos, que se presente cada lunes a la Fiscalía para firmar el cuaderno y el registro biométrico, que tramite su arraigo, que no se acerque a la familia de la víctima ni a los testigos y peritos, que no consuma alcohol ni porte armas. Si incumple cualquiera de estos requisitos, Omar Alejandro Ordoñez volverá a la cárcel.

Sobre este tema la Defensora del Pueblo, Nadia Cruz, indicó que todo el sistema judicial Boliviano debería cambiar.

“El sistema de justicia llega a ser indolente y totalmente alejado de la realidad boliviana, que de lo único que se encarga es de realizar detenciones preventivas, procedimientos abreviados o procesos archivados (…) hay una inacción absoluta en el tema de investigación (…) Los jueces, fiscales e investigadores que no generan la debida diligencia, para que este tipo de hechos tengan sentencias ejecutoriadas”, señaló Cruz.

La Defensora indicó que las familias quedan en zozobra ante la posible libertad de los agresores. “Temen una posible venganza, hay una interrogante de qué va pasar, con ese tipo de determinaciones judiciales (…), que es una muestra clara de la irresponsabilidad de nuestro sistema de justicia”, acotó.