Sus hijas y allegados exigen que se haga justicia y que se determinen las responsabilidades en torno a su fallecimiento.
11/03/2025 9:22
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El juicio por la muerte de Diego Armando Maradona arrancó en Argentina, en medio de un fuerte clamor por justicia. Siete profesionales de la salud enfrentan acusaciones de homicidio simple por su presunta negligencia en la atención del astro del fútbol. La Fiscalía sostiene que el fallecimiento del exfutbolista, ocurrido el 25 de noviembre de 2020, pudo haberse evitado si hubiera recibido los cuidados adecuados.
La autopsia reveló que Maradona murió a los 60 años debido a un “edema agudo de pulmón” y “una insuficiencia cardíaca crónica”. Sin embargo, la investigación determinó que estaba en una situación de “desamparo" y “librado a su suerte”, según la calificación de los fiscales. La acusación recae sobre ocho profesionales de la salud, de los cuales siete enfrentan juicio en los tribunales de San Isidro. Podrían recibir penas de entre 8 y 25 años de prisión.
Los acusados
Entre los principales imputados está el neurocirujano Leopoldo Luque, quien operó a Maradona semanas antes de su fallecimiento. Se le acusa de haber incumplido sus obligaciones médicas y de haber minimizado los síntomas del paciente. Asimismo, los mensajes filtrados en la causa muestran que se refería a Maradona con desprecio y que podría haber ocultado información a su familia.
La psiquiatra Agustina Cosachov también está en el banquillo. Se la acusa de haber administrado medicación contraindicada y de no haber controlado personalmente la salud del exfutbolista. Además, se la señala por haber emitido un certificado falso donde afirmaba que Maradona estaba “orientado y lúcido” sin haberlo evaluado.
El psicólogo Carlos Díaz es otro de los imputados. Se lo acusa de no haber promovido una internación adecuada para el tratamiento de Maradona y de haber ocultado información sobre su real estado de salud.
El enfermero Ricardo Almirón, quien tenía a cargo el turno nocturno, es señalado por haber registrado datos inconsistentes sobre el estado de Maradona. Los fiscales sostienen que cuando informó que el paciente estaba estable, en realidad ya estaba agonizando.
El supervisor médico Pedro Di Spagna está acusado de haber visitado al exfutbolista solo dos veces en dos semanas y de no haber garantizado la realización de los estudios solicitados.
Finalmente, Nancy Forlini y Mariano Perroni, responsables de la organización del equipo de enfermeros, enfrentan cargos por la falta de controles adecuados y por haber permitido que la internación domiciliaria se llevara a cabo sin las condiciones mínimas necesarias.
Un juicio de alto impacto
El proceso judicial genera una gran expectativa en la opinión pública, dado que Maradona es una figura icónica no solo en Argentina, sino en el mundo entero. Sus hijas y allegados exigen que se haga justicia y que se determinen las responsabilidades en torno a su fallecimiento.
El tribunal deberá definir si existió una negligencia criminal en el tratamiento que recibió Maradona y si los acusados actuaron con un desinterés que contribuyó a su muerte. El juicio promete revelar detalles desconocidos sobre las últimas semanas de vida del exfutbolista y podría sentar un precedente en el ámbito de la responsabilidad médica en Argentina.
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