Roba un banco en su primera cita y usa a la chica como escape

Una mujer de Massachusetts se convirtió en conductora de escape de un asaltante sin saberlo, después de que el hombre que conoció por un internet (aplicación de citas) robara un banco en su primera cita.

Christopher Castillo, se declaró culpable esta semana de robo a mano armada, tres cargos de asalto y por agresión contra un oficial de policía, todos cometidos en su primera cita el 5 de diciembre de 2016, según el fiscal del distrito del condado de Bristol. Oficina.

Castillo fue sentenciado a tres años en la prisión estatal por el robo, más dos años en la Casa de Correcciones del Condado de Bristol por luchar violentamente y escupir a la policía que intentó someterlo, según la oficina del fiscal de distrito.

La mujer no fue acusada: la historia de la "peor cita de la historia" fue suficiente castigo.

Todo comenzó, dijo la mujer a la policía, cuando recogió a Castillo de la casa de sus padres en Chepachet, Rhode Island, y lo condujo 30 minutos al este hacia North Attleboro, Massachusetts. Ella dijo que él bebió vino en el asiento del pasajero de su auto (que también es ilegal, pero no fue acusado por eso).

Los dos nunca se habían conocido en persona antes de ese fatídico día de 2016, le dijo a la policía. Entonces, ¿por qué pensaría que algo andaba mal cuando él le dijo que se detuviera cerca de un banco? ya que la mujer asumió razonablemente que quería sacar algo de efectivo.

Él salió de su auto y la dejó allí sola por unos minutos. Luego, de repente, regresó corriendo, sudando con gafas de sol, un sombrero, una pistola y $us 1,000 en efectivo en la mano, dijo la mujer. Ella "entró en pánico", le dijo a la policía, por lo que hizo lo que él le dijo.

Castillo había entrado en la sucursal del Banco de Ahorros del Condado de Bristol y le mostró una pistola al cajero. Exigió $us 1,000 y dijo que lo necesitaba con urgencia.

El cajero le entregó el dinero, luego volvió corriendo a la cita y le ordenó que pisara el acelerador.

Su cómplice accidental obedeció al principio, pero una vez que vio las sirenas de la policía de North Attleboro atrás de ella, inmediatamente se detuvo y se alejó del auto.

Castillo se quedó adentro y se agachó de la policía. La policía sacó a Castillo del auto de su desafortunada cita mientras él "luchaba violentamente", los escupió y les dijo que su arma no estaba cargada, según la oficina del fiscal de distrito.

Después de ser sometido y esposado, la policía registró el auto y encontró una pistola calibre 44, una antigüedad perteneciente al padrastro de Castillo, y el sombrero y las gafas de sol que coincidían con la descripción de lo que llevaba el ladrón, más 1.000 dólares, que sustrajo del banco.

Años después de la fecha del infierno, Castillo terminó sentenciado a cinco años de encarcelamiento. Su cita comenzó sin cargo, y probablemente con un escepticismo saludable hacia las citas en línea.