Coronavirus perjudica a trabajadoras sexuales

Ante la sumatoria de 1.000 muertes y más de 40 mil infectados en el mundo, según datos manejados por la Organización Mundial de la Salud. Las Prostitutas de Nueva Zelanda, han tenido que cambiar algunas estrategias ante la baja del 50 % de clientes, tras el origen del brote del virus.

En una entrevista a un medio local, han compartido la forma del cómo han tratado de salir adelante en medio de esta gran pandemia.

Las trabajadoras sexuales chinas; han denunciado que niegan su nacionalidad, porque las relacionan con el virus y otras ofrecen grandes descuentos para no perder más clientes que temen contagiarse de coronavirus.

“No menciono más que soy china y ofrezco un gran descuento, pero igual nos evitan como si fuéramos el virus” declaró una prostituta en anonimato al medio local.

Algunas páginas que ofrecen servicios sexuales por internet, han tenido que cambiar las promociones de sus meretrices por coreanas, japonesas o asiáticas en general.

Una de las consultadas, de nacionalidad china aseguró que, a pesar de no haber vuelto a su país, hace 8 años, los clientes la miran como si fuera el propio virus, y por eso ha tenido que bajar su precio de 180 a 90 dólares para sobrevivir.

Pero las trabajadoras también han tomado ciertas medidas, no se mezclan con clientes que tengan síntomas similares al del virus.

“Les digo que no pueden hacer una reserva si tienen tos, dolor de garganta o síntomas de resfriado y gripe. Todos mis clientes tienen que desinfectar sus manos después de tocar el dinero”, mencionó una de ellas, que no es natural de China.

La prostitución es legal y regulada en Nueva Zelanda, pero solo las personas residentes pueden dedicarse a este trabajo.