“Perdónenme por favor, estoy en Malasia, presa”; boliviana detenida por tráfico de drogas

La familia de Francylle B.F., una joven de 28 años, recibió la noticia más impactante de sus vidas, cuando tras semanas de angustiosa búsqueda, se enteraron de que su pariente se encuentra detenida en Malasia por tráfico de cocaína. La noticia llegó como un shock para la familia, que la había dado por desaparecida desde su inesperada partida.

Según fuentes cercanas a la familia, Francylle emprendió un viaje sin previo aviso aparentemente desde el Aeropuerto Internacional de Viru Viru en Santa Cruz, con la “noble intención” de conseguir dinero para ayudar en la recuperación de su madre, quien luchaba contra el cáncer. Sin embargo, su misión se vio truncada cuando las autoridades de Malasia la sorprendieron con una cantidad de cocaína en su posesión.

En un contacto telefónico con su hermano, la joven pidió perdón a su familia y expresó su angustia por la situación en la que se encuentra. “No sé cómo acepté hacerlo, perdónenme por favor, cuiden a mis hijas”, suplicó la joven boliviana.

Trágicamente, la madre de Francylle falleció mientras ella se encontraba detenida en el país asiático, añadiendo más dolor a una familia ya desgarrada por su repentina desaparición.

Ahora, los familiares de la mujer están buscando desesperadamente el apoyo del Gobierno de Bolivia para intentar repatriarla a su tierra natal. En Malasia, la ley de drogas se basa en una política de tolerancia cero, con penas severas incluso por posesión de pequeñas cantidades de sustancias controladas. El futuro de Francylle en el país asiático es incierto, puesto que la pena por el tráfico de cocaína puede ser desde latigazos hasta perpetua e incluso pena de muerte, dependiendo de la cantidad de sustancias controladas involucradas en el delito.