Otra historia insólita en el fútbol: ejecutó el córner y él mismo anotó de cabeza

En 1954, Pilo Calandria, legendario goleador de Nueva Chicago Excursionista, fue protagonista de una de las jugadas más inusuales que se recuerden. Durante un partido, se disponía a ejecutar un tiro de esquina cuando un fuerte viento comenzó a soplar, elevando el balón en el aire durante varios segundos.

Calandria, sin perder tiempo, corrió hacia el área y, cuando la pelota descendió, la cabeceó directamente al gol. Sin embargo, para sorpresa de todos, el árbitro decidió anular el tanto, ya que las reglas impiden que un mismo jugador toque dos veces seguidas el balón en una acción sin que otro futbolista intervenga.

Este caso recuerda a una historia similar ocurrida en Brasil el 28 de agosto de 1949, cuando Russo, en una situación también favorecida por el viento, ejecutó un córner, corrió al área y marcó de cabeza. “Yo hice un gol inédito”, declaró años después, recordando aquella jugada que, al igual que la de Calandria, parece sacada de un relato de ficción.