Marset sigue en Paraguay y lidera envío de droga a Europa, según la Secretaría Antidrogas

Según la Secretaría Nacional Antidrogas (Senad) de Paraguay, el narcotraficante uruguayo Sebastián Enrique Marset Cabrera, con antecedentes desde 2018, controla desde Paraguay una de las mayores redes de tráfico de cocaína a Europa.

Para las autoridades paraguayas, Marset aún se encuentra en territorio paraguayo, utilizando todo un sistema de protección que le permite moverse con impunidad.

La senadora del Partido Liberal Celeste Amarilla, es una de las legisladoras paraguayas que considera que Sebastián Marset no ha salido de Paraguay y permanece escondido. Amanera de poner en contexto lo fácil que ha sido para Marset internarse en su país, Amarilla apuntó a la dictadura de Alfredo Stroessner, como la promotora de las actividades ilícitas en Paraguay.

Dijo que en el gobierno de Stroessner permitió el tráfico de autos, drogas, armas, mujeres, etc. Incluso señaló que la línea aérea paraguaya LAP era “el camión carguero del contrabando” de cigarrillos, wiskys, ropa, entre otros productos.

Francisco Ayala, director de Comunicación de la Senad, afirma que Marset, utilizando documentos falsos bolivianos e incluso con sus documentos uruguayos, logró moverse entre Bolivia, Uruguay y Paraguay. “Fue así que pudo penetrar en los ámbitos político, religioso, financiero y deportivo”, manifestó.  

Para Roque Orrego, docente e investigador en Ciencias Jurídicas, la falta de vigilancias de sus fronteras, ríos y del espacio aéreo, han convertido a Paraguay en un punto clave de una ruta mundial del narcotráfico de cocaína.

“Hoy día, Paraguay está siendo un holding de distribución de la cocaína, facilita a ello, la vulnerabilidad de nuestro espacio aéreo, el hecho de que nosotros apenas estemos cubriendo un 3% de la vigilancia de nuestro territorio, es un dato muy importante para explicar la facilidad con que se actúa”, explicó.  

Marset controla una de las mayores redes de tráfico de cocaína a Europa desde un país que ya se ha convertido en un punto clave de la ruta mundial del narcotráfico por falta de vigilancia de fronteras, ríos y espacio aéreo, entre otros motivos.