La naturaleza demandada

"Al que madruga, Dios lo ayuda" y el gallo de Corinne Fesseau lo sabe. En el suroeste de Francia, tiene lugar una curiosa batalla legal entre vecinos, la que se da porque el gallo de la parte demandada canta demasiado temprano y molesta con sus cacareos a los impulsores de la acusación.

El juicio del gallo estaba previsto para este jueves en un tribunal de la localidad de Rochefort, pero ha sido postergado para el próximo 4 de julio por una cuestión legal, informa la prensa francesa.

Corinne Fesseau residente en la localidad rural de Saint Pierre d'Oléron, y fue denunciada por unos vecinos citadinos que tienen una casa en la que se instalan solo en las vacaciones.

"Vienen solo dos veces al año a la isla y cuando vienen quieren hacer lo que quieren" dijo Fesseau. 

Este anecdótico caso ha provocado la indignación del alcalde de Saint Pierre d'Oléron, Christophe Sueur. "Hoy denuncian el cacareo, y mañana ¿qué será? ¿Las gaviotas? ¿El ruido del viento? ¿Nuestros acentos?", criticó el funcionario.

La dueña de Maurice, el gallo, dijo estar dispuesta a dialogar con los demandantes, pero éstos se opusieron a tal posibilidad. Por su parte, el abogado de los querellantes ha indicado que sus clientes están dispuestos a llegar a un arreglo amistoso, pero piden paz y tranquilidad.

Solo quieren que encierren al gallo durante la noche, porque se trata de una urbanización y no está en medio del campo.