“No dormíamos, todos sentíamos su dolor. Yo estoy sola, y él sigue haciendo daño”

Doña Matilde Guayanoy, es la esposa de don Juan, quien murió a manos del falso médico, luego de padecer su agonía por 4 meses. “Se que ya nada me lo va a devolver, solo pido que se haga justicia”, indicó la señora Matilde con gran pesar por la pérdida de su esposo.

“Volver a recordar para mi es doloroso. Me arrepiento, estuviera con vida todavía. Llorábamos los dos, él se caía y lo alzábamos, con mis hijos sufríamos todos juntos, no dormíamos porque todos sentíamos ese dolor. Hemos gastado arto, se que nadie me va devolver todo, ahora me he quedado sola. Tenía una vida por delante, era un hombre trabajador. Yo estoy sola y el sigue haciendo daño”,

“El tenía dolor de estomago y lo llevé al centro médico, luego a la Pampa. Le hicieron los análisis y todo salió bien, pero le pedían una endoscopia. Mi esposo lo sacó del Facebook por que estaba en promoción”, comentó dona Matilde.

Don Juan fue atendido por el falso médico. “Pensamos que era un médico de verdad, él entró solo, porque no me dejaron entrar a mí, por lo menos una hora esperé afuera, luego sale mi esposo como si fuera un zombie, estaba adormecido y no podía hablar”, aseguró la esposa de don Juan.

Doña Matilde, indicó que ante de ingresar su esposo le preguntó al falso médico “doctor qué es lo que tengo” y una vez salió de la endoscopia el doctor le dijo “te voy a decir la verdad, ya que otros médicos no te lo dirán: tenes úlcera, tenes gastritis, pero vas a sanar”, contó.

Cuando llegaron a su casa, don Juan no estaba bien, y según su esposa él le explicó que se sentía como si lo “hubieran raspado con una cuchara por dentro”, afirmó la esposa del señor Juan quien indica que ‘le agradecieron al doctor’.

Don Juan quedó con ese dolor, pero aun así él continuaba trabajando. Ya no podía comer y cuando tomaba agua lo vomitaba y le recomendaron tomar sopa blanca pero ya no pudo consentir la comida.

“Así pasaron los días, lo llevé al centro médico, pero no le encontraban nada, todo estaba tranquilo, después empezó a vomitar. Nadie explicaba porqué vomitaba; primero era verde, y así continuó. Luego lo llevamos en ambulancia al hospital Japonés”, recordó con gran dolor doña Matilde.