Gastó una fortuna y se sometió a dos cirugías para ser más alto

Moses Gibson, un estadounidense de 41 años, ha captado la atención mundial tras someterse a dos costosas y dolorosas cirugías de alargamiento de piernas para aumentar su estatura. Motivado por años de inseguridad debido a su 1.65 metros de altura, Gibson invirtió más de 170.000 dólares para alcanzar los 1.78 metros.

El ingeniero de software, que también trabajaba como conductor de Uber para ahorrar el dinero, confesó haber intentado métodos menos invasivos, como suplementos, ejercicios e incluso hipnosis, antes de optar por la cirugía. "Simplemente no me sentía bien conmigo mismo", declaró Gibson a medios internacionales, refiriéndose a cómo su estatura afectaba su confianza y su vida social.

La primera intervención quirúrgica se realizó en 2021, enfocándose en el alargamiento de los fémures y añadiéndole 7 centímetros. No satisfecho, en marzo de 2023 se sometió a una segunda cirugía para alargar las tibias, ganando otros 6 centímetros. El procedimiento consiste en romper los huesos de las piernas e insertar clavos magnéticos extensibles. Estos clavos se "estiran" gradualmente un milímetro al día con un dispositivo externo, lo que estimula la creación de nuevo tejido óseo.

Aunque el proceso fue "extremadamente doloroso" y requirió meses de rehabilitación, Gibson asegura que valió la pena. "Ahora camino con seguridad. Siento que me ven diferente", afirmó. El cambio físico le ha permitido usar ropa que antes evitaba y, lo más importante para él, ha mejorado significativamente su vida social, llegando incluso a tener una relación.

La historia de Moses Gibson se ha vuelto viral en redes sociales, desatando un intenso debate sobre la autoestima, la presión social relacionada con la apariencia física, los estándares de belleza masculinos y los límites éticos y personales de la cirugía estética. A pesar de los desafíos, Gibson no se arrepiente y anima a otros que consideren el procedimiento a que lo hagan.