Un gesto desató la furia: Mauricio Soria y Marcelo Straccia se agarraron a golpes en la Caldera de Diablo

El fútbol boliviano vivió una jornada marcada por la tensión y los impulsos desbordados. Todo ocurrió en la recta final del partido entre Blooming y Totora Real Oruro en el estadio Gilberto Parada de Montero, cuando un gesto provocador del técnico argentino Marcelo Straccia hacia la hinchada celeste encendió los ánimos y desencadenó un duelo físico con Mauricio Soria, entrenador del equipo cruceño.

Según testigos, el gesto fue interpretado como una burla infantil hacia la barra local. Al frente lo tenía Soria, quien no tardó en reaccionar. Cuando ambos técnicos se dirigían a los vestuarios, se cruzaron palabras subidas de tono que derivaron en golpes en el interior de los camerines. Jugadores de ambos equipos corrieron al túnel para intervenir y proteger a sus respectivos entrenadores, generando una escena caótica que obligó a interrumpir momentáneamente el encuentro.

Las imágenes del altercado, fue captado por nuestro camarógrafo Enersto Guitiérrez. La policía tuvo que intervenir para separar a los técnicos, quienes finalmente fueron expulsados por los árbitros del partido.

Straccia se mostró visiblemente alterado tras su salida del campo, lanzando más gestos e ironías hacia el público local, lo que incrementó aún más la indignación. Mientras tanto, se espera que el informe arbitral y el fallo del Tribunal de Disciplina Deportiva determinen las sanciones correspondientes para ambos entrenadores.

Lo que comenzó como un partido intenso terminó dejando una imagen que el fútbol no merece repetir: la del descontrol, la provocación y la violencia reemplazando al juego limpio y al respeto. 

Finalmente el partido terminó 4-2 a favor de Blooming que ahora se ubica tercero en la tabla de competencia del fútbol boliviano.