Beatriz refleja desesperación cuando uno la mira a los ojos y clama que todo el sector gremial se cuide y practique todas las medidas de bioseguridad
31/07/2020 20:18
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Con lágrimas en los ojos y muy acongojada, Beatriz Jiménez, sale de su casa todos los días apenas amanece para poder ganarse el pan del día con la venta de barbijos que ella misma fabrica por la pandemia del coronavirus en las calles de la ciudad de La Paz.
La mujer tiene aproximadamente 50 años de edad, deambula con su puesto de venta y es el sostén de su familia que pasa por una situación difícil.
Su hijo le da fuerzas para salir adelante y es su motor de vida para luchar por ganar un poco de dinero.
“Tengo mi hijo que esta postrado en la casa, en silla de ruedas, por eso salimos para ganarnos un peso, aunque sea, nosotros que somos madres solteras”, aseveró.
Beatriz refleja desesperación cuando uno la mira a los ojos y clama que todo el sector gremial se cuide y practique todas las medidas de bioseguridad ya que están expuestos a contraer covid-19 en cualquier momento, incluso contó que varios de sus amigos, con quienes compartía tardes de charla, fallecieron a causa de este mal.
“Yo les pido a todas mis compañeras que se cuiden, es bien triste (…) han muerto varios de nuestros compañeros, de uno de mis compañeros no hay cementerio ni quien le entierre, salimos al día salimos para ganar unos pesos”, mencionó.
Esta es la realizada de miles de bolivianos, que a pesar del riesgo que implica, salen a las calles en busca de dinero para cumplir con sus obligaciones.
De acuerdo a un estudio realizado por la Organización Internacional del Trabajo, Bolivia encabeza el ranking de empleo en el sector informal de la economía, superando el 70% y con una representación mayor de mujeres.
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