La investigación de la Red Uno muestra cómo familias cruceñas peregrinan, pese a la lluvia, el frío nocturno y los mosquitos para obtener una ficha y recibir atención médica.
03/05/2024 16:57
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Conseguir una ficha para acceder a una consulta médica en los hospitales públicos de Santa Cruz se ha convertido en un calvario para la población. La escasez de recursos y la saturación de los centros hospitalarios han llevado a cientos de personas a pasar noches enteras fuera de los hospitales con la esperanza de obtener un turno para atención médica. Familias enteras, abrigadas con colchas, cartones y cualquier cosa que pueda proporcionar algo de calor, forman largas filas frente a los hospitales de tercer nivel, esperando que su sacrificio sea recompensado con una cita.
La periodista Magaly Benquique, quien acompañó a los pacientes y sus familiares durante una noche, describió la experiencia como “un viacrucis humano”. La amenaza de lluvia, el frío nocturno y los mosquitos no disuaden a quienes buscan acceso a la salud.
El caso de Gustavo, un hombre de 35 años, ilustra la dura realidad. Diagnosticado con un tumor en los testículos, estuvo a punto de ser operado, pero su procedimiento fue cancelado en el último momento. Derivado al Hospital San Juan de Dios, tuvo que comenzar de cero con los trámites, durmiendo afuera para obtener una ficha para el urólogo. Él ya había comprado todo para la cirugía, pero le dijeron que la cirugía era de riesgo, relató Gustavo, visiblemente afectado.
“Resulta que estaba a punto de ingresar al quirófano cuando el doctor me dijo: 'No lo puedo operar, es riesgoso; podría pasarle algo.' Ya había comprado todo para la cirugía. Luego me dijo: 'Váyase al hospital San Juan de Dios.' Ahora estoy tomando calmantes, y estoy aquí afuera esperando a ver qué harán conmigo”, relató Gustavo.
El problema radica en la evidente saturación de los hospitales públicos. Los trabajadores de la salud señalaron que no hay suficientes médicos, insumos ni medicamentos para satisfacer la demanda creciente. “El sistema está colapsado”, afirmaron.
Durante la cobertura, las cámaras de nuestro equipo presenciaron un intento de robo a un familiar que dormía fuera de un hospital. La intervención del equipo de Notivisión evitó el incidente, pero es uno de los peligros que enfrentan aquellos que se ven obligados a esperar en la calle para obtener atención médica.
Luego de ser sorprendido, el presunto delincuente se retiró rápidamente del lugar. “No lo sentí, me venció el sueño por el cansancio. Estamos aquí porque mi madre está internada en emergencia y hay que estar presentes, ya que a menudo salen con recetas y es necesario correr a la farmacia”, relató la mujer.
Por su parte, una testigo dijo: “Ellos (los delincuentes) pasan a cualquier hora para ver qué hay de valor para robar. Si ven a alguien dormido y sospechan que tiene algo de valor, se cambian de ropa y vuelven. Se acercan, se mezclan entre las personas y empiezan a robar”.
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