El aceite de ricino: El aliado ideal para unas pestañas y cejas hermosas

El aceite de ricino es considerado como un remedio natural excelente para estimular el crecimiento del pelo, incluido el de las pestañas y las ceja. Lo que lo hace especial es que tiene un elevado contenido en ácidos grasos esenciales, proteínas y vitamina E.

Este producto proviene del árbol del ricino, que es originario del centro de África y otras regiones de clima tropical. Se sabe que una de las propiedades de la planta es el rejuvenecimiento. Contiene  además una variedad de nutrientes, por lo que es recomendado para lucir unas pestañas más largas y unas cejas más gruesas y pobladas.

Posee un alto contenido de ácido ricinoleico que promueve el crecimiento del vello. Penetra hasta los folículos pilosos y alimenta la raíz del pelo, por lo que su uso frecuente hará que consigas tus objetivos en torno a unas pestañas hermosas. 

También, tiene ácidos grasos omega-9 que ayudan a combatir el exceso de sebo, que a veces contribuye a la caída de las pestañas o impide que estas crezcan sanas y fuertes.

Además, tiene propiedades antibacterianas ideales para combatir gérmenes y hongos que pueden dañar las pestañas e impedir su buen crecimiento.

Hidrata, fortalece y estimula

El aceite del ricino también actúa como hidratante natural, lubricando las pestañas y favoreciendo su crecimiento. Este es un buen tratamiento para evitar su caída, ocasionada entre otras cosas por un mal uso del maquillaje, alergias, estrés, deficiencias nutricionales, o alteraciones hormonales.

El uso de aceite ricino en las cejas contribuye a fomentar su crecimiento para lucirlas gruesas y pobladas, así como con la forma ideal para tu rostro. Tal como es la tendencia para este año 2019.

Si quieres incluir el aceite de ricino en tu rutina de cuidado diario, puedes adquirirlo en farmacias o en tiendas que vendan productos naturales.

¿Cómo debes colocártelo?

Antes de aplicar el aceite de ricino en cejas y pestañas, debes asear bien tu rostro con agua y gel facial para retirar cualquier residuo de maquillaje o suciedad. Además, si maquillaste tus cejas y pestañas, utiliza un desmaquillante para dejarlas limpias.

Para aplicar el aceite de ricino en las pestañas utiliza un cepillo aplicador de rímel limpio, mójalo con el producto y colócalo en las pestañas de la misma forma que aplicarías el rímel.

Es decir, desde el interior del ojo deslizando el cepillo desde la base de las pestañas hasta las puntas hasta que todas queden bien impregnadas. Para las cejas, repite el mismo procedimiento con el cepillo de rímel y aplícalo directamente sobre ellas siguiendo la dirección del crecimiento del vello.

Recuerda hacer este tratamiento antes de dormir. Deja que el aceite actúe en las pestañas y cejas durante toda la noche y al día siguiente, al levantarte, lava tu rostro con abundante agua tibia y un gel facial limpiador.

¿En cuánto tiempo se ven los beneficios?

Los beneficios que brinda el aceite de ricino en cejas y pestañas se logran con la constancia. Por eso es importante que lo hagas de forma recurrente y correcta, aunque los resultados dependerán en cada caso del grosor y del vello que tenga cada persona en esa zona del cuerpo.

Por lo general, los resultados se empiezan a notar luego de 5 o 6 semanas de iniciar el tratamiento.

El ciclo de desarrollo del pelo en las cejas es de 2 a 3 meses, pero el uso del aceite de ricino podría acelerar este tiempo. Por ello es que su uso es recomendable para que luzcas unas cejas y pestañas espectaculares. Recuerda que debes utilizarlo para fines cosméticos y además que haya sido procesado en frío para evitar cualquier tipo de irritación.

Si por el contrario, al incluir el uso del aceite de ricino en la rutina de belleza de cejas y pestañas, observas alguna reacción desfavorable como picazón o irritación, suspende su uso y acude a un dermatólogo.