En medio de llanto y dolor dieron el último adiós a la bebé Ashlyn

El caso se conoció este viernes 25 de marzo, cuando una niña de un año y nueve meses de nacida llegó sin vida al Centro de Salud de Cerro Verde, al sur de la ciudad, con signos de violencia.

Los galenos informaron sobre el hecho a la Fuerza Especial de Lucha Contra el Crimen (FELCC), a la Defensoría de la Niñez y Adolescencia, y la Fiscalía departamental indicaron que la menor presentaba signos de violencia en el rostro y otras partes de su integridad física, mismas que serían de data antigua.

De acuerdo al el examen externo, el cuerpo de la pequeña presenta una equimosis verdosa en la región parietal izquierda, además de varios golpes con data antigua a nivel torácico y moretones en la región lumbar.

El informe señala que Ashlyn N. Ch. murió por un shock hemorrágico, laceración hepática, traumatismo abdominal cerrado y politraumatismo. El Instituto de Investigaciones Forenses (IDIF) descartó que hubiera agresión sexual.

El padrastro habría señalado que la niña cayó de un metro de altura y no despertó. Ahora la Fiscalía departamental y la Policía investigan el caso por el delito de infanticidio.

“En la zona sur, una menor de edad habría sido llevada por sus padres a un hospital, donde llegó sin signos vitales (…) En el examen físico, registra lesiones de data antigua y una posible situación de agresión sexual”, informó Nuria Gonzales, fiscal departamental de Cochabamba.

Los restos mortales de la pequeña fueron entregados a la hermana de la madre, que veló sus restos, junto a familiares y amigos en su domicilio en la zona de Cerro Verde. La madre fue liberada anoche, mientras el padrastro espera su audiencia de medidas cautelares.

Fátima Terrazas, representante del colectivo “Mujeres de Fuego”, indicó que “la niña tenía hematomas en el cuello, es decir que fue asfixiada, tiene coágulos en la cara, significa que le han tapado la boca para que no se escuche su llanto”.