El presidente Arce propuso la reconstrucción de la doctrina militar en sintonía con la Constitución Política del Estado, alejándose de modelos impuestos desde el exterior.
07/08/2025 11:57
Escuchar esta nota
En el marco de la celebración de los 200 años de las Fuerzas Armadas del Estado Plurinacional de Bolivia, el presidente Luis Arce encabezó la ceremonia oficial y la parada militar en Sucre, donde hizo un llamado a iniciar una nueva etapa estratégica, institucional y doctrinal para las Fuerzas Armadas, en proyección al año 2050.
“Llegamos al Bicentenario con unas Fuerzas Armadas alineadas. Hoy convocamos a su transformación con compromiso, sabiduría y lealtad al pueblo”, afirmó el mandatario, destacando el rol histórico de la institución castrense y planteando una visión de futuro centrada en la defensa integral del Estado y sus recursos estratégicos.
En ese marco, remarcó que la llegada al Bicentenario representa un momento crucial para repensar la estructura y el rol de las Fuerzas Armadas, a partir de una estrategia nacional soberana que supere las doctrinas extranjeras impuestas en el pasado.
“A 200 años de existencia institucional, el Estado declara superada toda forma de subordinación extranjera. La nueva política de defensa debe estar guiada por los principios de autodeterminación de los pueblos, justicia social, integridad territorial y defensa de nuestros bienes públicos y recursos estratégicos”, sostuvo.
En ese sentido, el jefe de Estado enfatizó que Bolivia debe prepararse para enfrentar nuevas amenazas del siglo XXI, no solo convencionales, sino también “amenazas híbridas”, como la guerra tecnológica y el ecocidio derivado del capitalismo salvaje, que atenta contra los recursos naturales como el litio, los hidrocarburos y el agua.
Arce subrayó que las Fuerzas Armadas deben asumir un papel activo en la protección de las fronteras y garantizar el control en los corredores bioceánicos, espacios geoestratégicos para el desarrollo nacional y la soberanía logística del país.
“El Estado Plurinacional debe proyectar una política de defensa que responda a los desafíos globales sin perder su esencia pacifista ni su compromiso con la integración regional”, remarcó.
El presidente también hizo referencia a las amenazas internas que se han vivido en los últimos años y advirtió que la nueva política de defensa debe tener como eje central el respeto a la voluntad popular y la defensa de la institucionalidad democrática.
“No debemos olvidar que las amenazas no solo han sido externas. En 2009 y nuevamente en 2024, Bolivia enfrentó intentos de quiebre institucional. Por eso, la defensa del siglo XXI debe garantizar que jamás se alce un arma contra el pueblo y que exista plena confianza en las instituciones democráticas”, sentenció.
En uno de los pasajes más destacados de su intervención, el presidente Arce propuso la reconstrucción de la doctrina militar en sintonía con la Constitución Política del Estado, alejándose de modelos impuestos desde el exterior como la “doctrina de seguridad nacional”, a la que calificó de “nefasta”.
“El Estado rechaza toda forma de subordinación extranjera. La doctrina militar debe nacer desde los pueblos, con una visión de defensa compartida que priorice la vida, la justicia y la paz. El nuevo hecho militar debe ser uno que jamás vuelva a ser instrumento de opresión”, concluyó.
Mira la programación en Red Uno Play
10:00
12:25
14:00
14:30
15:30
17:40
10:00
12:25
14:00
14:30
15:30
17:40