Una testigo relató haber escuchado un fuerte golpe desde una habitación contigua.
17/07/2025 13:06
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Una tragedia sacude al Hospital Infantil Jeanne-de-Flandre, en Lille (Francia), donde una recién nacida perdió la vida tras sufrir una caída provocada por un niño de apenas seis años. La pequeña, identificada como Zayneb-Cassandra, tenía solo nueve días de nacida cuando falleció el pasado 15 de julio a causa de una grave lesión cerebral.
El hecho ocurrió el viernes 11 de julio mientras la madre de la menor, de 23 años, firmaba su alta médica. La bebé —nacida prematuramente a los 7.5 meses de gestación por cesárea— se encontraba en la unidad de cuidados neonatales. En un momento de descuido, el hijo de otra paciente ingresó sin autorización a la sala, manipuló a la bebé e intentó alzarla del pañal, lo que provocó que la pequeña cayera de cabeza contra el suelo.
El niño, descrito como un “alborotador” por varias familias del área de maternidad, ya había sido visto anteriormente deambulando sin supervisión por los pasillos del hospital. Incluso, días antes del fatal incidente, una enfermera habría advertido a su madre sobre su conducta. Sin embargo, no se tomaron medidas concretas para restringir su acceso a zonas sensibles.
Una testigo relató haber escuchado un fuerte golpe desde una habitación contigua. Minutos después, el personal encontró al niño sentado junto al cuerpo inconsciente de Zayneb-Cassandra. La bebé fue trasladada de inmediato a cuidados intensivos, donde luchó por su vida durante cuatro días. Finalmente, falleció el martes a las 18:10.
El Hospital Universitario de Lille expresó su “profunda consternación” por lo ocurrido y anunció una investigación administrativa interna para esclarecer las fallas en los protocolos de seguridad y supervisión. “Estamos profundamente afectados y expresamos nuestra solidaridad con la familia”, indicaron en un comunicado oficial.
Paralelamente, la brigada de menores del Servicio de Policía Judicial de Lille inició una investigación penal para esclarecer los hechos. No obstante, la edad del niño involucrado, de tan solo seis años, representa un obstáculo legal para la imputación de responsabilidad penal.
Mientras tanto, la familia de Zayneb-Cassandra —quien era la primera hija de la joven pareja— exige justicia y respuestas claras sobre cómo un niño sin supervisión pudo acceder a una unidad tan delicada como la neonatal y causar un daño irreparable.
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