Matusalén realizó un rito tras asesinar a Mayerly

Después de su captura y declaración ante la Policía, Matusalén Mancilla L. (22), confesó que luego de quitar la vida a Mayerly Condori Quispe, ahorcándola con una cuerda, procedió a desmembrarla justificando que lo hizo para que su alma no lo persiguiera, en una suerte de rito. 

“Encontramos en el lugar del hecho un corazón, el sujeto distribuyó las partes del cuerpo en una circunferencia de 15 metros, todas estas acciones procuraban un intento de confusión y él dijo que desmembró el cuerpo porque temía (que el alma) que lo persiguiera”, explicó el comandante de la Policía Boliviana, coronel Jhonny Aguilera la mañana de este miércoles. 

El jefe policial indicó que el comportamiento de Matusalén deriva en una celotipia, un trastorno delirante irreversible y multifactorial que hace pensar al paciente que su pareja es infiel.

“Los videos colectados en el celular sitúan la circunstancia anterior a la muerte, una especie de rito que él genera, conductas sexuales, sadomasoquistas, eróticas, que se traducen en esa agresión”, agregó Aguilera.

El autor del macabro crimen era expareja de la víctima y dijo que cometió el asesinato por una reacción de celos, al encontrar un mensaje entre la muchacha y su actual pareja, R. C. H (34).

De acuerdo a su declaración, él la citó el domingo en el bosquecillo de la zona Inca Llojeta de La Paz, próximo a la ciudad de El Alto, donde acabó con la vida de la mujer. 

La familia informó que Mayerly presentaba una discapacidad mental, pues tenía la mente de una niña de 12 años. 

Aguilera informó que Mayerly salió de su domicilio el domingo, diciendo a su madre que iría a la feria de la zona 16 de Julio para pedirle la pensión a su padre. Desapareció ese día y sus restos fueron hallados el lunes, a las 13:20, por una menor de edad y su hermano, quienes buscaban a su gato entre los árboles de esa ladera.

Antecedentes penales

En el 2014, Matusalén habría matado y asesinado a una niña menor de 4 años en la comunidad Santa Ana de Mosetén en el municipio de Palos Blancos, en la provincia Sud Yungas. El hecho causó conmoción a la población. 

"Yo solo quiero que mi familia esté bien", dijo Matusalén, cuando era adolescente, a La Red Uno de Bolivia