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Red Uno de Bolivia.- Todo comenzó el año 2002 cuando los vecinos de una pareja que cría mastines tibetanos comenzaron a quejarse de los ladridos continuos de los perros. Los dueños de los canes responden al nombre de Karen Szewc y John Updegraff, un matrimonio que vive en una granja a 240 kilómetros al sur de Eugene, Oregon.
En vista que los reclamos de los vecinos no fueron atendidos por la pareja propietaria de los perros, el caso fue llevado a la justicia.
La demanda fue presentada de forma colectiva por los vecinos, pero además el propio Condado de Jackson también se presentó como parte querellante.
Pasaron los años, y las advertencias de la corte no fueron tomadas en cuenta por Karen y John, lo que terminó el pasado miércoles 30 de agosto con una sentencia del juez Timothy Gerking, que ordena a los dueños de los mastines pagar una indemnización a sus vecinos Debra y Dale Krein por 238.000 dólares y costear una cirugía de cuerdas vocales a los perros.
Karen y John apelaron el caso ante la Corte de Apelaciones de Oregon, sin embargo esta instancia ratificó la sentencia del juez Gerking.
Ahora solo resta esperar la fecha en que los 6 mastines tibetanos serán silenciados para siempre.
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