Dan el último adiós a Franz Chuquimia, vocalista de Jach'a Mallku

Colegas, amigos, familiares y seguidores asisten a darle el último adiós a Franz Chuquimia, vocalista director y fundador del grupo folclórico boliviano Jach'a Mallku, quien falleció la mañana de este lunes.

Delante del féretro está su foto con su característico poncho, chalina y sombrero, imagen que quedará en la memoria de todos su público.

Durante el velorio, se realizó una misa, también un grupo interpretó algunas de sus muchas composiciones, que fueron éxitos de los más de 15 discos que publicó.

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Velorio del director, fundador y primera voz de Jach'a Mallku. Fotos: Daniel MIRANDA@APGNoticias.

El mundo de la cultura quedó consternado al conocer la noticia. Sus conocidos lo califican como un gran amigo "y lo será siempre". Recordaron los videos que compartió durante la época de la pandemia. Además, aseguraron que su legado será eterno.

Sus compañeros de Jach'a Mallku recuerdan que siempre conservaba su positivismo. Era el hermano mayor, aseguran, y saben que desde donde esté les seguirá cuidando y cantando con ellos. "Vuelta alto, querido maestro y amigo", afirman.

Franklin Soria, líder del grupo Hiru Hicho, con la voz entrecortada, recuerda a Franz como una persona entregada a su familia, humilde, sincera y de un corazón noble.

Asimismo, creó el centro cultural Jach'a Mallku en Pampahasi, para capacitar a jóvenes músicos sobre la música boliviana.

"Compadre, amigo y maestro ha dejado un legado, ha marcado historia en el folclore. No solamente con Jach'a Mallku, que ha marcado grandes épocas; desde muy joven dedicó su vida a muchas instituciones", destacó Soria.

Franz Jaime Chuquimia Coronel tenía más de 45 años de trayectoria y un registro vocal singular. Nació en La Paz en 1960 y comenzó con su carrera musical a los 14 años, formando parte de diferentes agrupaciones.

Junto a Fulvio Ballón, René Carrasco, Edwin Rowel y Víctor H. Ferrel fundó Jach’a Mallku el 22 de octubre de 1985. Luego, hubo varios cambios de integrantes. Grabaron más de una decena de discos, se presentaron casi en todas las ciudades del país, además de llegar a varios países de América y Europa llevando las morenadas, chuntunquis, kullawadas y otros ritmos de Bolivia para el mundo. Por ejemplo, el legendario programa mexicano "Siempre en Domingo".