El quirquincho andino es declarado Patrimonio Natural de Bolivia

El Gobierno nacional declaró al quirquincho andino o armadillo, un animal en peligro de extinción, como Patrimonio Natural del Estado Plurinacional, mediante la promulgación de la Ley 1424.

“Nuestro quirquincho andino ya es Patrimonio Natural de Bolivia. Promulgamos una Ley 1424 que así lo declara, para que, junto a los gobiernos autónomos, garanticemos su protección y defensa, ya que está en peligro de extinción. Protejamos unidos nuestra maravillosa biodiversidad”, escribió en su cuenta en Twitter el presidente Luis Arce.

La Ley 1424 establece que el Órgano Ejecutivo, en coordinación con Entidades Territoriales Autónomas, priorizarán la “protección, conservación y defensa” de la especie y su hábitat a través de políticas, programas y proyectos a corto, mediano y largo plazo. En ese sentido, el primer mandatario llamó a los gobiernos subnacionales a garantizar la permanencia del Chaetophractus Nationi.

Según investigaciones, existe una población aproximada de 15 mil armadillos en las zonas andinas de Bolivia, Perú, y el norte de Argentina y Chile, informó la agencia ABI.

Alrededor de 2.000 quirquinchos son cazados en el país cada año, situación que lo coloca en la lista de especies en peligro de extinción establecido en el Libro Rojo de la Fauna Silvestre de Vertebrados de Bolivia.

Su amenaza principal continúa siendo “la caza con fines comerciales y culturales, ya que su caparazón es muy apreciado por artesanos y otros comerciantes que fabrican instrumentos musicales, como charango, matraca y también es muy utilizado como amuleto de la suerte”, se menciona en el documento emitido por la Asamblea Legislativa.

Esta especie es omnívora y habita pastizales de altura donde cava su madriguera en suelos arenosos. Una de sus principales características es la especie de armadura que tiene en el dorso, llega a medir hasta 40 centímetros de longitud y su cola puede llegar a ser de 12 centímetros. Tiene un dorso de color acanelado y pelaje que varía su coloración, puede ser entre un tono canela a un blanco brillante y su anatomía está completamente adaptada a la excavación, según información de la Organización No Gubernamental Conservación Internacional, recoge la agencia de noticias EFE.