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Mellizos se salvaron de morir ahogados en la tragedia familiar en cascadas de Cuevas

El paseo familiar terminó en tragedia el fin de semana, debido a que el padre y su hijo mayor murieron ahogados, mientras que los mellizos (un niño y una niña) se salvaron de hundirse en el agua. 

15/01/2024 9:53

Santa Cruz, Bolivia

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En una jornada que estaba destinada a ser un día familiar lleno de diversión en el Centro Ecológico de Cuevas en Samaipata, Santa Cruz, se convirtió en una tragedia desgarradora. Gualberto Soria Orías, de 44 años, y su hijo Ricardo S. R., de 13, perdieron la vida ahogados en las cascadas de Cuevas el domingo.

Según informes preliminares, el padre disfrutaba del día junto a sus hijos, incluyendo los mellizos, en el mencionado centro ecológico. Elizabeth Rodríguez, la madre del menor fallecido, relató entre lágrimas: “Me parte el alma esta situación, mi hijo salió con su papá a pasear y no volvieron”.

“Él (papá) los lleva los fines de semana, pero por vacaciones tuvieron unos días más. Ya habían ido a un paseo y decidieron ir a otro. Mi niña me dio la noticia; primero me habló un hombre y no podía creerlo. Le dije: ‘Usted me miente, no señora. Véngase rápido’, a Cuevas me respondió. ‘Aquí están sus dos niños’ (refiriéndose a los mellizos) y el otro está desaparecido. No lo encontramos. Su papá perdió la vida, no había nadie para rescatarlo y la gente grababa, pero no hacía nada”, agregó con la voz entre cortada.

La abuela del menor, entre lágrimas, expresó su dolor y solicitó ayuda a la población: “Me quedé sin un nieto, quiero justicia. Pido un profesional psicólogo para mis nietos porque están mal, somos de escasos recursos y mis niños están sufriendo”.

El día que prometía ser de alegría se tornó trágico cuando Ricardo S. R. pidió ayuda a su hermana. “Mi hija me contó que su hermano le pidió ayuda, pero ella rescató a uno, el que estaba más cerca, y Ricardo le decía: 'Mariana, ayúdame'. Esas fueron sus últimas palabras de mi hijo. Su otro hermano (el mellizo) le tendió la mano, pero lo soltó porque el agua los estaba llevando a los dos, y su padre se metió (a rescatarlo) y no salió más. Él (papá) sabía nadar, pero se golpeó la cabeza según el médico forense y por eso nunca salió del agua”.

“Mis hijos, los mellizos, se encuentran muy mal. Me dicen: 'Mamá, no llores, ellos se van a ir al cielo', pero es imposible no llorar. Mi hijo iba a cumplir 14 años en abril. Era un niño aplicado, bueno; quería ser médico y era muy estudioso. Lo último que conversé con Ricardo fue cuando me dijo: ‘Mamá, estamos bien felices'. Le respondí: 'Mi amor, tienen que cuidarse porque salen tanto a pasear’. ‘No, mamá, ya somos grandes, sabemos cuidarnos’, me respondió. Él decía: ‘Yo voy a ser médico, mamá’”, añadió entre lágrimas.

Elizabeth, consternada, exige una investigación a fondo: “Quiero que se investigue cómo sucedieron las cosas, no puedo comprender cómo pasó, habiendo tanta gente alrededor”. La madre también hizo un llamado a las autoridades para que esclarezcan los hechos.

La progenitora concluyó diciendo: “He perdido a los seres que más quería. No puedo creer que haya pasado eso. Pido a las autoridades que investiguen”.

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