La tormenta tropical podría tocar tierra en la mañana del sábado como el primer huracán de la temporada 2019 del Atlántico.
11/07/2019 23:24
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Nerviosos residentes de Nueva Orleans se preparaban el jueves para evacuar frente a la proximidad de la Tormenta Tropical Barry, que podría llevar "lluvias extremas" e inundaciones antes de que la tormenta toque tierra en la mañana del sábado como el primer huracán de la temporada 2019 del Atlántico.
Barry se formó en la mañana del jueves en el Golfo de México, con vientos máximos sostenidos de 64 kilómetros por hora (40 millas por hora), un día después de que arrojó casi 30 centímetros (un pie) de lluvia en Nueva Orleans, informó el Servicio Meteorológico Nacional.
Una alerta de tormenta tropical fue emitida en la tarde del jueves para el área metropolitana de Nueva Orleans, y una alerta de huracán estaba vigente en un gran trecho de la costa de Luisiana al sur de la ciudad.
Hasta el jueves, la tormenta ya había golpeado las operaciones de petróleo y gas en el Golfo de México, debido a que las compañías de energía cerraron la producción de más de la mitad de las plataformas y evacuaron al personal de unas 200 instalaciones marinas y una refinería costera.
Debido a que lo peor de la tormenta pasaría por el extremo oeste Nueva Orleans en lugar de azotarla directamente, las autoridades de la ciudad se abstuvieron de ordenar evacuaciones, pero instaron a los residentes a proteger sus propiedades, reunir suministros y refugiarse en sus casas.
Algunos residentes, sin embargo, recordando la devastación que dejó el huracán Katrina en 2005, que causó la muerte de unas 1.800 personas en la costa del Golfo de México, estaban decididos a escapar de la trayectoria de la tormenta. La amenaza de inundaciones a lo largo del río Misisipi, que atraviesa el centro de la ciudad, era una gran preocupación.
"Es realmente el río lo que nos preocupa", dijo Betsey Hazard, quien vive con su marido Jack y sus dos hijos pequeños a una cuadra del río Misisipi. "Ellos dicen que el río no va a inundar Nueva Orleans, pero tenemos un hijo de cinco años y un bebé de 10 meses, y no queremos arriesgarnos", agregó.
Los Hazard dijeron que viajarían pronto al vecino estado de Misisipi para pasar la tormenta allí. Otros fueron a los supermercados por agua embotellada, hielo, alimentos y cervezas, atestando las tierras de abarrotes en tal cantidad que algunos se quedaron sin carros de compras.
En la ciudad, conductores estacionaron sus autos en medianas elevadas de las calles con la esperanza de dar a los vehículos algo extra de altura para evitar que los dañen posibles inundaciones.
Barry llevaría una marejada ciclónica desde la costa a la desembocadura del río, lo que aumentaría su altura unos 5,9 metros (19 pies) el sábado, el mayor nivel en los registros desde la década de 1950 y peligrosamente cerca del límite del sistema de diques que protege a la ciudad.
Meteorólogos proyectan que caerán entre 25 y 50 centímetros (10 y 20 pulgadas) de lluvia en la costa del Golfo de México el viernes y sábado desde East Texas a Nueva Orleans y la costa de Luisiana.
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