La oposición acusa al Gobierno de manipular los resultados del Censo y advierte que la falta de una redistribución transparente de escaños podría ser utilizada como pretexto para postergar las elecciones generales de 2025.
07/01/2025 23:30
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La Ley de Redistribución de Escaños, basada en los resultados del Censo de Población y Vivienda 2024, genera un intenso debate político en Bolivia. Diputados de la oposición denunciaron que el Gobierno del presidente Luis Arce podría utilizar esta normativa como pretexto para postergar las elecciones generales previstas para agosto de 2025.
El diputado de Creemos, Erwin Bazán, rechazó categóricamente los resultados del censo, calificándolos de “fraude censal”.
“Santa Cruz debería tener tres nuevos escaños, no uno. Este Censo fue grosero con la realidad y sirve al MAS como una herramienta para perpetuarse en el poder. Si no se aprueba la ley, usarán esto como excusa para postergar las elecciones”, afirmó.
Por su parte, el diputado de Comunidad Ciudadana (CC), Pablo Arízaga, también expresó su rechazo a la norma y acusó al Tribunal Supremo Electoral (TSE) de manipular las cifras utilizadas para calcular la redistribución de escaños.
Según Arízaga, el TSE empleó el índice de desarrollo humano (IDH) de Egipto, que es 0,728, para realizar las multiplicaciones del modelo de redistribución, pese a que el IDH de Bolivia es 0,698, lo que pone en duda la transparencia del proceso.
“Aprobar o rechazar esta ley puede ser usado por el Gobierno como una trampa legal para extender su mandato”, advirtió.
La Comisión de Constitución de la Cámara de Diputados iniciará este miércoles el tratamiento de la normativa, con el plazo límite fijado por el TSE para el 15 de enero. De no promulgarse la ley en esta fecha, se mantendría la distribución vigente basada en el censo de 2012, lo que, afectaría las elecciones generales de 2025.
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